
Nuevos roles y retos del farmacéutico de hospital. New roles and challenges of the hospital pharmacist
Más datosA lo largo de más de 50 años el farmacéutico hospitalario ha ido evolucionando en conocimientos y habilidades para dar respuesta a los nuevas necesidades y desafíos a los que se enfrentan los servicios de farmacia hospitalaria en su actividad diaria.
En el año 2008, un amplio panel de expertos de la SEFH definió el Proyecto 2020 «Hacia el futuro con seguridad», lo que permitió fijar las estrategias para la transformación de los servicios de farmacia hospitalaria, estableciéndose objetivos estratégicos para su crecimiento y el de la profesión, en aspectos claves como las nuevas tecnologías, la seguridad del paciente, la atención farmacéutica continuada, la evidencia científica, la docencia y la investigación.
Una vez concluidos y analizados los avances que han permitido dicho plan, y siendo conscientes de que la trayectoria de la farmacia hospitalaria ha sido siempre ir avanzando, innovando y enfrentándose a nuevos desafíos (pacientes, sociedad, investigación, medioambiente, tecnología), se hace necesario continuar abordando que nuevos retos y roles debe seguir acometiendo el farmacéutico de hospital en los próximos años.
Por ello, el Proyecto 2030 de la SEFH, elaborado también por un amplio grupo de expertos, servirá de hoja de ruta para alcanzar este fin.
El presente número monográfico de Farmacia Hospitalaria enfocado a los nuevos roles y retos del farmacéutico de hospital en España, ha sido planteado por el Comité Editorial de la revista Farmacia Hospitalaria para tratar algunos de los temas que deben ser abordados en el corto plazo en los servicios de farmacia hospitalaria de nuestro país.
Este monográfico se compone de una editorial, 6 artículos especiales y una revisión, abordando algunos de los temas candentes en este momento.
Se aborda con una perspectiva desde el ámbito de la farmacia hospitalaria, un tema de preocupación como es la contaminación medioambiental de los medicamentos y la necesidad de encontrar soluciones, implicando a los diferentes agentes y actuando en todos los pasos del ciclo de vida del medicamento.
Por otra parte, se muestra el enorme desarrollo que están experimentado en los últimos años los medicamentos de terapias avanzadas, tanto industriales como en investigación, que conlleva un desafío para la farmacia hospitalaria a todos los niveles. La participación del servicio de farmacia en la producción académica de estos medicamentos supone un reto para los servicios de farmacia.
La personalización de los tratamientos ha supuesto un impulso para el desarrollo de la farmacogenética y la farmacogenómica en los servicios de farmacia. Este avance mejora la individualización terapéutica, ayudando a identificar el medicamento más efectivo para el paciente, evitando los daños potenciales. Por ello, estas disciplinas desempeñaran un papel significativo en el desarrollo futuro de medicamentos y en la toma de decisiones en la práctica clínica. Se presenta una revisión narrativa relativa a cómo se están aplicando estas disciplinas en la clínica, especialmente en España.
Otro aspecto relevante en los servicios de farmacia es la actividad investigadora que está en crecimiento y, por ello, la necesidad de estandarizar y promover dicha actividad, elaborando un cuadro de mando de 40 indicadores que evalúan publicaciones, recursos humanos, proyectos de investigación, tesis doctorales y patentes y registros de propiedad intelectual, que permitan gestionar y comparar la actividad propia o compartida con otros grupos de investigación, los recursos necesarios y los resultados de dicha investigación.
Un tema de la máxima actualidad es el uso de la inteligencia artificial (IA). Mediante la explotación de grandes volúmenes de datos sanitarios; los algoritmos de inteligencia artificial pueden identificar patrones y predecir resultados, lo que puede ayudar a las organizaciones sanitarias y sus profesionales a tomar mejores decisiones y alcanzar la mejora de resultados. La IA se ha introducido en la biomedicina, acelerando procesos, mejorando la precisión y la eficiencia y proporcionando una mejor atención al paciente. Los farmacéuticos hospitalarios que dominen la IA desempeñarán un papel crucial en esta transformación.
La formación de los farmacéuticos de hospital en los próximos años debe adaptarse y dar respuesta a constantes retos sociales y tecnológicos actuales y futuros, sin descuidar las áreas básicas de la profesión. Para ello es necesario adquirir conocimientos en lo que se conoce como salud integral digital: inteligencia artificial, tecnología y automatización, competencias digitales y nuevas formas de comunicación con los pacientes, como la telemedicina y la telefarmacia, que ya son una realidad en muchos hospitales. Ante este escenario digital aparecen nuevos riesgos y desafíos que afrontar, como la ciberseguridad y la ciberresiliencia, que hace inexcusable la capacitación y formación de los profesionales sanitarios en general, y en particular, de los farmacéuticos de hospital.
La farmacia hospitalaria es hoy una profesión marcada por los avances terapéuticos, con una actitud proactiva, centrada en las personas y en su salud. La evolución de los procesos es constante, con plena presencia de la digitalización, la robotización e incluso de la inteligencia artificial, en un entorno que además exige el uso eficiente y sostenible de estas herramientas. En este contexto, es necesario contar con una hoja de ruta que guíe el avance de la profesión y de los servicios de farmacia hospitalaria.
Siguiendo con la filosofía de la iniciativa 2020 la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria ha querido plantear los retos a los que se enfrenta la profesión actualmente y con una mirada hacia el 2030. Con este objetivo de planificación estratégica se han identificado y desarrollado 20 retos, que cubren las distintas áreas de actuación e implicación de la farmacia hospitalaria y que abarcan aspectos asistenciales, transversales, formación e investigación, así como áreas relacionadas con las personas y con las propias organizaciones o sistemas de salud. Para cada uno de ellos se han definido los objetivos, estándares, herramientas y recursos. También está previsto proporcionar herramientas que faciliten el seguimiento de la implementación y del impacto sobre la profesión, los pacientes y el entorno.
Queremos agradecer a todos los autores que han intervenido, el magnífico trabajo realizado, sin su ayuda este monográfico no hubiese sido posible.