La permanencia es una medida útil del éxito de los tratamientos antirretrovirales de última generación (AUG): raltegravir, darunavir, etravirina y maraviroc. El objetivo de nuestro estudio fue analizar la permanencia de los tratamientos antirretrovirales (TAR) que contenían al menos un AUG, y compararla con otros TAR utilizados en pacientes experimentados.
MétodosEstudio observacional, de casos y controles, de pacientes adultos externos cuyo TAR fue modificado entre 01/05/2008 y 01/09/2009. Los casos (pacientes con al menos un AUG) fueron emparejados (relación 1:1) con pacientes pretratados que cambiaron a un TAR sin AUG (controles). La variable principal fue la permanencia del TAR. El seguimiento se realizó desde la modificación del TAR hasta un año después del cierre del período de inclusión. Los resultados se ajustaron por las variables de confusión: CD4 y carga viral (CV) basales, infección VIH multirresistente y tiempo desde el primer TAR.
ResultadosSe incluyeron 112 pacientes en cada grupo. El tiempo de permanencia del TAR fue 16,7 meses (casos) vs 16,8 meses (controles), sin encontrarse diferencias estadísticamente significativas ajustando por las variables de confusión. La toxicidad fue el principal motivo de discontinuación (53,3% en casos vs 45,2% en controles, p =0,70). La media en la disminución del logaritmo de la CV fue 0,89 en los casos y 0,58 en los controles (p =0,223). El incremento de CD4/microL fue 77 y 73 respectivamente (p =0,480).
ConclusiónLa permanencia del TAR en los pacientes cuyo tratamiento contiene algún AUG es similar a la de los pacientes que no lo contienen.
Time of permanence is a useful measure of success in last generation antiretroviral (LGA) therapy: raltegravir, darunavir, etravirine and maraviroc. The aim of our study was to analyze the permanence of antiretroviral therapy (ART) containing at least one LGA, and to compare it with other ART used in experienced patients.
MethodsObservational case-control study. It included adult outpatients whose ART was switched between 01/05/2008 and 01/09/2009. Cases (patients with at least one LGA) were matched (1:1) with pretreated patients who switched to an ART without any LGA (controls). The primary endpoint was the permanence of ART. The follow-up was conducted from the modification of ART to a year after the closure of the inclusion period. Results were adjusted for confounding variables: CD4 and viral load (VL) at baseline, MDR HIV infection and time from the first ART.
Results112 patients were included in each group. The permanence of ART was 16.7 months (cases) vs 16.8 months (controls), although statistically significant differences were not found after adjusting for confounding variables. Toxicity was the main reason of discontinuation (53.3% in cases vs 45.2% in controls, p =0.70). The mean decrease in the logarithm of the VL was 0.89 in cases and 0.58 in controls (p =0.223). The increase of CD4/microL was 77 and 73 respectively (p = 0.480).
ConclusionsThe permanence of ART in patients whose treatment contains a LGA is similar to those without any LGA.
En la actualidad el tratamiento antirretroviral (TAR) ha logrado el control y mantenimiento de la enfermedad en los pacientes con VIH, disminuyendo considerablemente su morbilidad y mortalidad, haciendo de ésta, una enfermedad crónica. La comercialización de los fármacos antirretrovirales de última generación (AUG) ha supuesto nuevas opciones terapéuticas y pautas de rescate en pacientes multitratados, que generalmente presentan altas tasas de resistencia a varias familias de fármacos tradicionales, y que tienen un deterioro inmunológico y virológico mayor que los pacientes naïve, lo que dificulta su terapia antirretroviral. Estos AUG presentan diferentes mecanismos de acción: inhibidores de la integrasa (raltegravir), antagonistas del correceptor CCR5 (maraviroc), inhibidores de la proteasa (darunavir) e inhibidores de la transcriptasa inversa no análogos de nucleósidos (etravirina).
Los estudios pivotales han demostrado la eficacia de estos fármacos en la reducción de la carga viral (CV) y en el incremento del recuento de CD4, asociados o no, al tratamiento de base optimizado en pacientes multirresistentes. Su asociación aumentó el porcentaje de pacientes que negativizaron la CV a las 48 semanas de tratamiento en un 20-35%1. Además, su eficacia también ha sido evaluada en pacientes con menos experiencia previa a antirretrovirales (ART) y en pacientes naïve2-4. Paralelamente, hay datos que sugieren que estos fármacos poseen ventajas adicionales relacionadas tanto con la eficacia como con la seguridad. Raltegravir parece presentar una gran rapidez de acción ya que, comparado con efavirenz, consigue una mayor respuesta virológica a las 2, 4 y 8 semanas de tratamiento5,6. Maraviroc parece influir en la recuperación inmunológica7, y darunavir podría ser más potente que lopinavir (ambos potenciados con ritonavir) en determinadas situaciones clínicas2. También hay autores que sugieren que raltegravir y maraviroc tienen escaso impacto metabólico8,9. Además, raltegravir presenta un buen perfil de interacciones al no ser sustrato, ni inhibidor ni inductor, del CYP4501.
El análisis de la permanencia del TAR, definida como el tiempo transcurrido desde el inicio de un tratamiento hasta su discontinuación dentro de un período de observación, es una medida útil del éxito de estos AUG en la práctica clínica asistencial. Sin embargo, en la actualidad no se dispone de ningún estudio que evalúe la permanencia del TAR cuando éste incluye algunos de estos fármacos.
El objetivo principal del estudio es analizar la permanencia del tratamiento con AUG en pacientes previamente tratados, y compararla con regímenes que no incluyan estos fármacos.
MétodosSe realizó un estudio observacional de casos y controles (1:1) que incluyó pacientes adultos externos de un hospital general universitario, cuyo TAR fue modificado entre el 1/05/2008 y el 1/09/2009. Se consideraron casos todos aquellos pacientes que su nuevo TAR incluía, al menos, un AUG (raltegravir, darunavir, maraviroc, y/o etravirina). Para la selección del grupo control, cada caso se pareó 1:1 con un paciente cuyo nuevo TAR no incluyera ningún AUG en la misma fecha que el caso. Se excluyeron aquellos pacientes que formaban parte de algún ensayo clínico. El seguimiento de los pacientes se realizó hasta un año después del cierre del período de inclusión (01/09/2010).
Los datos clínicos se obtuvieron de la historia clínica del paciente y de los registros de dispensación del TAR. Las variables clínicas recogidas fueron: edad, sexo, CV, recuento de CD4, infección VIH multirresistente y tiempo desde el primer TAR (tTAR).
Se consideró infección VIH multirresistente cualquiera de las siguientes situaciones:
- a)
Presencia de mutaciones que conferían resistencia alta o media a:
- –
fármacos de las tres familias clásicas de ART: análogos de la transcriptasa inversa (ITIAN), no análogos de la transcriptasa inversa (ITINN) e inhibidores de la proteasa (IP) o
- –
todos los fármacos de dos de las tres familias clásicas, incluido los casos con ninguna mutación de resistencia en una de las familias (situación que supone riesgo de monoterapia funcional utilizando sólo ART clásicos).
- –
- b)
Amplia experiencia con ART: tratamiento durante 6 meses o más con al menos un fármaco de cada familia clásica de ART.
La variable principal del estudio fue la permanencia del tratamiento, definida como continuación con el mismo régimen terapéutico iniciado en el momento de la inclusión del paciente en el estudio. Se consideró discontinuación del tratamiento el cese en la dispensación de ese esquema terapéutico por modificación del mismo o por interrupción del TAR. No se consideró modificación del TAR el paso de fármacos comercializados de forma individual a presentaciones coformuladas (combos) o las variaciones de dosis. Se comparó el número de días de permanencia del mismo esquema terapéutico desde su inclusión hasta la fecha fin de seguimiento, y se analizó el porcentaje de pacientes que permanecían con el mismo TAR a los 6 y 12 meses de su inclusión en el estudio.
Las variables secundarias estudiadas fueron los motivos de discontinuación del tratamiento y la situación virológica e inmunológica de los pacientes al final del periodo de seguimiento.
Para la medida de la permanencia del tratamiento se revisaron las fechas de dispensación de los fármacos durante el periodo de estudio mediante el programa de gestión de pacientes externos del Servicio de Farmacia (Prescriplant® Pacientes Externos). Para el análisis de la situación virológica e inmunológica se recogieron los datos de CV y número de células CD4 de la última prueba analítica realizada al finalizar el período de seguimiento.
Análisis estadísticoLos resultados se expresan con la media y la desviación típica para las variables normales y con la mediana y rango intercuartílico (RIC) para las variables con distribución no normal. La mediana del número de días de permanencia y la probabilidad acumulada de interrupción del tratamiento a lo largo del período de estudio se estimaron mediante curvas de supervivencia de Kaplan-Meier. Ambos grupos fueron comparados utilizando el test Log-rank y el modelo de regresión de Cox ajustado por las variables de confusión. Se definieron como variables de confusión el logaritmo de la CV y el número de CD4 al inicio, tTAR e infección por VIH multirresistente. El análisis estadístico se llevó a cabo utilizando el paquete estadístico SPSS versión 18.0.
ResultadosSe incluyeron un total de 224 pacientes, 112 en cada uno de los grupos, cuyas características basales se muestran en la tabla 1. La mediana de seguimiento fue de 17,8 meses para ambos grupos (RIC en el grupo de AUG: 15,3-21,5 meses; RIC en el grupo control: 15,2-21,5 meses; p = 0,85).
Características basales de los pacientes
Características básales | Casos | Controles | p |
---|---|---|---|
Edad (años) | 46 (9,9) | 44 (9,9) | 0,970 |
Hombres (%) | 66,1 | 72,3 | 0,380 |
Pacientes con CV | |||
>50 copias/ml (%) | 51,8 | 60,7 | 0,220 |
CD4 (células/microL) | 364 (280) | 467 (289) | 0,008 |
Infección VIH | |||
multirresistente (%) | 75 | – | – |
tTAR (años) | 9,8 (3,6) | 7,9 (4,2) | 0,030 |
Los datos se expresan con la media (DE).
CV: carga viral; tTAR: tiempo desde el primer tratamiento antirretroviral.
La terapia más frecuente incluía raltegravir como único AUG y se prescribió en el 53% de los casos. El 32% tenían dos o más AUG en su TAR. La representación de los distintos AUG fue: raltegravir 86%, darunavir 36%, maraviroc 17% y etravirina 12%.
Respecto al grupo control, los ITINN formaban parte del tratamiento en el 52% de los pacientes, mientras que los IP en un 45%. El efavirenz fue parte del régimen terapéutico
PermanenciaAl final del período de seguimiento, la mediana de permanencia del tratamiento fue de 16,7 meses (510 días) en el grupo de AUG y de 16,8 meses (512 días) en el grupo control (RIC en el grupo de AUG 12,9-21,6 meses; RIC en el grupo control 9,0–20,7 meses), sin encontrarse diferencias estadísticamente significativas entre ellos (Figura 1); ni tampoco al ajustar la mediana de días de permanencia por las variables de confusión (HR 1,137, IC 95% 0,860-1,504).
No se encontraron diferencias estadísticamente significativas entre ambos grupos respecto al porcentaje de pacientes que permanecen en el tratamiento a los 6 y 12 meses de seguimiento (Tabla 2).
Otros resultadosDurante el período de seguimiento discontinuaron el tratamiento el 26% de los pacientes del grupo de AUG y el 28% del grupo control (p>0.05). Las causas de interrupción se detallan en la tabla 3.
Causas de discontinuación del TAR
Casos | Controles | ||
---|---|---|---|
N = 112 | N = 112 | p | |
Toxicidad del TAR (%) | 53,3 | 45,2 | 0,70 |
Simplificación del TAR (%) | 33,3 | 19,3 | 0,34 |
Interrupción voluntaria | |||
del TAR (%) | 6,6 | 9,7 | 0,96 |
Fallo virològico (%) | 3,3 | 12,9 | 0,37 |
Interacciones farmacológicas | |||
con el TAR (%) | 3,3 | 0 | 0,98 |
Sin datos (%) | 0 | 12,9 | – |
TAR: tratamiento antirretroviral.
Los dos grupos de pacientes mostraron una evolución inmunitaria y virológica similar (Tabla 4). Una vez realizado el ajuste por las variables de confusión, la media en la disminución del logaritmo de la CV al final del seguimiento fue de 0.89 en el grupo de AUGs frente a 0,58 en el grupo control, sin que se detectaran diferencias estadísticamente significativas entre ellos (p = 0,223). Con relación al incremento del número de CD4 tampoco se detectaron diferencias al ajustarlo por dichas variables (77 vs 73, p = 0,48), aunque tanto el recuento basal como el final fueron superiores en el grupo control.
Estado virológico e inmunológico basal y final
Casos | Controles | |||
---|---|---|---|---|
N = 112 | N = 112 | p | ||
Basal | 2,75 (1,7) | 2,48 (1,2) | 0,110 | |
CV en log (media) | Final | 1,86 (0,80) | 1,90 (0,80) | 0,700 |
Diferencia ajustada por variables | ||||
de confusión* | 0,89 | 0,58 | 0,223 | |
Basal | 364 (280) | 467 (289) | 0,008 | |
CD4 cels/ | Final | 441 (305) | 540 (285) | 0,013 |
microL (media) | Diferencia ajustada por variables | |||
de confusión* | 77 | 73 | 0,480 |
CV: carga viral.
*Variables de confusión: CV y CD4 basales, infección por VIH multirresistente y tTAR.
La cronicidad de la infección por VIH ha llevado a que la duración de los distintos tratamientos (permanencia) y los motivos de discontinuación sean factores a tener en cuenta en el diseño de estrategias terapéuticas a largo plazo, ya que prolongar la duración del tratamiento se ha convertido en uno de los principales retos del TAR. Por otro lado, las rápidas modificaciones en el TAR, como consecuencia de la aparición de nuevos fármacos y pautas posológicas, otorgan gran interés a este tipo de estudios.
Por ello, aunque el tiempo de permanencia es considerado una variable intermedia, tiene una gran relevancia al ser reflejo de la eficacia y seguridad de los regímenes terapéuticos.
Los nuevos AUG (raltegravir, maraviroc, etravirina y darunavir) han supuesto una gran aportación al arsenal terapéutico en el VIH, permitiendo diseñar pautas de rescate eficaces en pacientes en situación de multirresistencia1. La mayoría de los trabajos publicados que analizan el tiempo de permanencia y las causas de discontinuación del TAR son anteriores a la incorporación de estos nuevos fármacos10-14. No se ha encontrado ningún estudio que determine la permanencia de estos fármacos y la compare con los regímenes sin AUG.
Estudios previos a la aparición de terapias QD establecían la duración del primer TAR entre 11.8 y 19.2 meses10-12. Palella et al.10 obtuvieron una mediana de tiempo de permanencia del TAR de inicio de 11.8 meses para una cohorte de 1022 pacientes que iniciaron tratamiento entre 1996 y 1999. Chen et al.12 refirieron una mediana de permanencia de 19,2 meses en una cohorte de 405 pacientes que iniciaron TAR entre 1996 y 2001. La posterior reducción de la complejidad de las terapias y la aparición de ITIAN menos tóxicos contribuyeron a la reducción en la discontinuación del tratamiento. Así, Willing et al.15, que compararon el tiempo de permanencia antes y después de la aparición de las terapias QD en Estados Unidos (periodo 1: 2000-2004 y periodo 2: 2004-2007), demostraron una asociación entre la prescripción de nuevas terapias con mejor tolerabilidad y menor complejidad y el aumento en el tiempo de permanencia. Martin et at.14 obtuvieron una mediana de permanencia de 12.6 meses, con una duración significativamente mayor en regímenes basados en ITINN respecto a los basados en ITIAN o IP.
A pesar de los cambios en el perfil de prescripción del TAR en los últimos años, nuestros resultados en la permanencia son similares a los presentados anteriormente con otros regímenes11,12,14, sin encontrarse diferencias estadísticamente significativas entre casos y controles (16,7 vs 16,8 meses). No obstante, debe mencionarse que la mayoría de los estudios citados se han realizado en primera línea de tratamiento, donde se ha visto que el tiempo de permanencia es superior al de pacientes pretratados11.
El porcentaje de pacientes que experimentaron modificación del TAR fue superior en el grupo control a los 6 (89,2% vs 83,7%) y 12 meses (81,7% vs 74,9%), aunque no se encontraron diferencias estadísticamente significativas. Tampoco se encontraron diferencias entre los motivos de interrupción del TAR, siendo los más prevalentes en ambos grupos la toxicidad, la simplificación de la terapia y la interrupción voluntaria, resultados similares a los de otros estudios14, lo que pone de manifiesto la influencia de la tolerancia al TAR en la permanencia. En este trabajo se observa un mayor porcentaje de discontinuación por simplificación en los casos y un mayor porcentaje por fallo virológico en los controles. El fracaso virológico ha pasado a suponer tan sólo el 3,3% de los motivos de discontinuación del TAR en los pacientes con AUG.
Estos resultados deben interpretarse teniendo en consideración sus limitaciones. Existe heterogeneidad inicial entre los casos y controles en cuanto al recuento basal de CD4 y al tTAR. Sin embargo, tanto el cálculo de la permanencia como la probabilidad acumulada de interrupción y las respuestas inmunológica y virológica al final del seguimiento se ajustaron en función de estas variables de confusión. Otra limitación fue que para el análisis de los resultados no se consideró la adherencia al tratamiento ni la pauta posológica de cada TAR, ya que tasas bajas de adherencia y regímenes terapéuticos complejos se han asociado con una disminución en los tiempos de permanencia15-18. Por último, aunque nuestros resultados fueron obtenidos tras al menos un año de seguimiento, sería interesante conocer qué sucede tras un periodo de seguimiento superior. En cualquier caso, nuestros resultados constatan que la permanencia del TAR con AUG es similar a la de TAR sin AUG en pacientes altamente pretratados tras un año de seguimiento.
Permanence of last generation antiretroviral in daily clinical practica